Cuando surge la necesidad de evaluar una propuesta de negocio y/o de mejora para tomar una decisión hay dos aspectos fundamentales que debes considerar:
enfoque
análisis
Enfoque refiere a evaluar la propuesta imaginando que la estás implementando, es decir llevar tu mente hacia el futuro, lo cual a su vez te va a permitir entenderla con mayor detalle y precisión, te ayudará a identificar en forma más clara lo bueno, lo malo y los riesgos de implementarla, así como supuestos sobre los que se basan y/o los limitantes que enfrentan, entre otros. Puede sonar muy lógico pero no siempre se da así, generalmente nos concentramos en medir el impacto y dejamos en segundo término el analizar todo aquello que rodea la propuesta, no dedicamos el tiempo necesario para visualizarla (imaginarla) desde el futuro, generalmente nos concentramos en identificar los resultados antes de tener claro el contexto. Es muy importante antes y durante el análisis de tu propuesta tener claro su entorno, te va a permitir tomar mejores decisiones durante su análisis, medición de su impacto al implementarla, y la única forma de hacerlo es darse el tiempo suficiente para visualizar y narrar lo que implicaría vivir esa historia, implementar la propuesta, dando más importancia en el inicio a lo que sucederá en su alrededor antes que a los resultados finales que esperas se generen, a esto me refiero con enfoque; recomiendo para esto salir de tu entorno habitual, sal a tomar un café, un té o incluso una cerveza, eso sí muy fría.
Sin un enfoque adecuado difícilmente vas a poder generar un análisis sólido de la propuesta que lleve a tomar una buena decisión, ya sea que tú la vayas a tomar o alguien más.
El análisis por su parte, tiene que ver con la forma en la que estructuras la información disponible, mides el impacto de la propuesta y comunicas los resultados.
Estructurar la información es muy importante para mantener un orden que te lleve a hacer un mejor uso de tu tiempo durante el análisis y evaluación de la propuesta, para asegurar la congruencia de tu análisis y comunicarlo de mejor manera.
Medir el impacto, el motivo real del análisis de la propuesta, refiere a concentrarse en 3 puntos de tu historia mismos que si logras identificar y medir correctamente te aseguro que te permitirán contar con los elementos para tomar una buena decisión: lo bueno, lo malo y los riesgos; completando correctamente estos 3 puntos y asegurando la completa congruencia entre éstos te permitirá estar casi del otro lado, lo demás es cuestión de identificar y dejar claros los supuestos sobre los cuales se fundamentan y los límites que considera tu análisis, es decir hasta dónde llega, así como proporcionar cierta información que respalde tu análisis y que no deje dudas en quien lo revisa.
La comunicación de los resultados es la cereza en el pastel de tu análisis y ésta depende en gran parte de la forma en la que hayas estructurado tu análisis y lógico de los resultados generados, concéntrate en plantear de una forma concreta lo bueno, lo malo y los riesgos, lo demás es información complementaria que deberás conocer por si la preguntan.
Cuando requieras medir una propuesta de negocio y/o mejora date el tiempo para visualizarla con detalle, entender la mayor parte de su entorno y concéntrate en medir correctamente y dejar claro lo bueno, lo malo y los riesgos de implementarla.
El enfoque es la parte más importante de la evaluación de una propuesta de negocio y/o de mejora, te va a permitir generar a su vez un adecuado análisis de ésta mismo que debe mostrar o poner sobre la mesa, lo bueno, lo malo y los riesgos de implementarla.
¿Qué tanto tiempo te das a analizar el entorno futuro de tu propuesta?
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